Es la que se debe guardar con el vehículo precedente para que ante cualquier incidencia sea posible detenerse sin peligro.
 

Estando atento, el tiempo de reacción en general es de 1 segundo y la distancia a recorrer depende directamente de la velocidad a la que se circula. A mayor velocidad, mayor debe ser la distancia de seguridad.

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A mayor velocidad son necesarios más metros para frenar, por eso es necesario guardar una mayor distancia con el vehículo que no precede.

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La distancia de seguridad entre vehículos es una separación protectora fundamental, colabora en prevenir un siniestro por alcance (impactar un vehículo por detrás).

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Para evitar impactar a un vehículo por detrás se necesita, al menos, tres segundos de diferencia entre vehículos, que pueden calcular pronunciando ‘1101, 1102, 1103...’ respecto a un punto fijo en la vía. De todas formas recordemos que: tres segundos pueden ser insuficientes ante frenadas muy fuertes, a velocidades excesivas, con mal tiempo o pavimento mojado y, en esas circunstancias, habrá de ampliarse a tres o más segundos.

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En caso de que nos vayan a adelantar, es importante que ampliemos la distancia con el vehículo que nos precede para facilitar la maniobra de adelantamiento.

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