El exceso de velocidad es un factor de riesgo especialmente peligroso, dado que actúa como agravante en un siniestro de tránsito.

 

A mayor velocidad del vehículo, mayor energía cinética se debe disipar en caso de siniestro lo que implica un mayor riesgo de lesión grave o mortal.

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 Velocidad reglamentaria: la indica la señalización. 

 

En zonas urbanas la velocidad de circulación recomendada es de 45km/h y en ruta es de 90km/h.

La única excepción es donde la señalización indica otras alternativas.

 

 Velocidad adecuada: la indican los sentidos y depende del contexto. 

 

• Disminuir la velocidad en caso que la calle esté mojada o haya niebla, en zonas escolares o cruces peatonales y en zonas rurales donde puede haber animales sueltos.

• La reducción de la velocidad en zonas urbanas es esencial para proteger a peatones y ciclistas.

• Es importante reducir la velocidad en todas las intersecciones, aún teniendo la preferencia o con semáforo en verde.